MAREA
Llegó a mis costas la marea negra con las primeras olas de la noche
no distinguí su corazón de grasa tiznando el rompeolas de la playa la mar estaba alta al despertar llegaba hasta mi casa la marea no pude controlarla resistí cuanto se puede ante el destino mismo
perdí como se pierde ante el destino
llegó a mis costas la marea negra me arrebató el color pero dejó la suficiente tierra para verla el agua exacta para agonizar el aire justo para no asfixiarse
bastante vida para amar la muerte
JOSE MANCILLA
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