Mi voz te nombra
sin dejar de hacerlo
y te llamo a cada instante
aún cuando tú no estás.
Mi voz te nombra
llamándote dulcemente
mi amor... mi cielo...
y no me puedes escuchar.
Mi voz te nombra y
en el silencio se apaga
porque tú no la escuchas
es que tan lejano estás!
Mi voz es como un susurro
tranquilo como agua de mar
y en el silencio te llama
aún cuando tú no estás...
María Eva