QUERIDO TIEMPO 

No vayas tan de prisa. 
No, ahora, que recién he comprendido y he 

sentido en carne propia el milagro de estar viva.

Hoy, querido tiempo, han despertado mis ansias dormidas. 
Hoy, mi alma ha abierto sus alas, buscando 

nuevos horizontes por descubrir.

Detente un poco, mi fiel amigo tiempo, ten 

compasión de éste cuerpo, que aún se estremece

 con el olor a tierra mojada, 
el cantar de los pájaros y las caricias del viento.

Dame un poco más de tu paciencia, querido amigo. 
Que te cuesta caminar más lento? 
Déjame disfrutar de la vida; ésta vida maravillosa,

 que recién he descubierto.

Qué me dices, amigo TIEMPO? 
ACEPTAS HACER UN TRATO CONMIGO?

A/D