Recuerdo...
Recuerdo con tristeza el desolado lugar, el maravilloso
día, cuando con un abrazo me enseñaste lo maravilloso que
es la vida. Recuerdo días sublimes, excelsas vicisitudes,
eximios momentos cuando con tu compañía me enseñaste lo
maravilloso que es la amistad.
Recuerdo con hondo pesar días lejanos y remotos cuando
delicadas manos al estrechar mi lánguido ser,
me enseñaron lo maravilloso que son tus caricias.
Recuerdo días aciagos execrables, evocaciones a
causa de los escarnios aquellos lograron ceñir mi
rostro de melancolía, cuando sucedía aquello me enseñaste a sonreír.
Aquellos días todos me enseñaste, pero ahora sin ti… todo lo perdí.