La expectativa me mantiene en un estado de gratitud acerca de todo el bien que llega a mí. Puede que no sepa lo que depara el futuro, mas sueño en grande y mantengo una visión poderosa. Tomo medidas para crear la vida de mis sueños.
Sustento con amor mis relaciones con familiares y amigos, cuido de mi salud física y emocional, hago mis mejores esfuerzos en el trabajo y comparto mis talentos a través del servicio.
Mis oraciones me mantienen a tono con maravillosas posibilidades. Al orar, declaro paz, salud, prosperidad y gozo y mantengo una actitud confiada y positiva. No me preocupo por cómo o cuándo se manifestará mi bien. Tener una expectativa gozosa me asegura que la vida de mis sueños ya es mía.