Sé que no estas, en la aldea, expatriado, te extraño... Es nuestro tiempo azul, nuestra hora azul. No estas presente aquí, mis pensamientos viajan, no hay red que detenga su empecinado vuelo, cuando despliegan sus alas, las nubes se dividen, la lluvia se detiene, y así, llegan volando a ti, te envuelven, abrazan, besan, te recorren, te aman, te sienten, te acarician, allí, donde estés.