Luchemos contra la violencia
El 25 de Noviembre fue declarado Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres en el Primer Encuentro Feminista de Latinoamérica, que se celebró en Bogotá en julio de 1.981.
En este encuentro las mujeres denunciaron la violencia de género en todos los ámbitos de la sociedad, los malos tratos y los asesinatos en el hogar, las violaciones, el acoso sexual y la violencia en general hacia las mujeres. Se eligió este día para no olvidar el asesinato de las hermanas Mirabal, tres activistas asesinadas en 1.960 a manos de la policía secreta del dictador Trujillo, en la República Dominicana.
La ONU dio carácter oficial a esta fecha.
"La violencia de género es quizás la más vergonzosa violación de los derechos humanos. Mientras continúe, no podemos afirmar que estemos logrando progresos reales hacia la igualdad, el desarrollo y la paz".
-Kofi Annan, Secretario General de las Naciones Unidas-
A pesar del paso del tiempo, la violencia hacia las mujeres no cede.
La violencia hacia las mujeres se conforma, por lo contrario a lo que los medios de comunicación masiva suelen demostrar, en una problemática estructural que compete al terreno de la violencia machista, situación que atenta contra la vida de las mujeres a diario y que mucho tiene que ver con “la inseguridad”, permanente que viven principalmente en el ámbito doméstico.
Como ejemplo de uno de los aspectos que hacen a la violación de los derechos humanos de las mujeres, se pueden considerar algunas cifras para reconocer la dimensión de este flagelo que suele escabullirse entre la vergüenza, la indiferencia y la naturalización de la propia situación de violencia.
Estos datos son una muestra de lo que significa el femicidio, el asesinato de mujeres principalmente por su propia condición de mujer, en nuestra sociedad. Este delito, la forma más extrema de violencia sexista, es aún hoy una situación cotidiana, como consecuencia final del ciclo de la violencia que viven a diario muchas mujeres.
La erradicación de la violencia contra las mujeres es una tarea que compromete al Estado, las instituciones y la ciudadanía en general para garantizar que las víctimas de violencia denuncien los hechos, se garantice un proceso judicial justo, rápido y efectivo, y las víctimas reciban una atención de calidad.
"Unidas todo podemos, denunciemos el abuso"