VEIS ESA VIEJA...
¿Veis esa vieja escuálida y horrible?
Pues bien:
Aunque parézcate imposible, fue la mujer más bella entre las bellas;
el clavel envidió sus labios rojos, y ante la luz de sus divinos ojos
vacilaron el sol y las estrellas.
Y hoy...
¿quién puede quererla?
¿Quién un beso
podrá dejar en su semblante impreso?
¡Yo!
-me dijo un extraño que me oía-
Yo que por ella en la existencia lucho,
que soy feliz cuando su voz escucho...
¡Esa vieja es la hermosa madre mía!
JULIO FLOREZ
COLOMBIA
clic
|