Opiniones encontradas entre comerciantes y transportadores surgieron este domingo en Colombia luego de que el gobierno venezolano anunciara el cierre nocturno de la frontera binacional de 2.200 kilómetros, con el fin de combatir el contrabando.
Mientras que comerciantes en la ciudad fronteriza de Cúcuta enfatizaron en que la medida no afectará a los negocios legales, transportadores consideran que ésta traerá pérdidas para el sector.
"No vemos que esto pueda tener un impacto significativo negativo sobre la economía formal. Gran parte de las exportaciones hacia Venezuela se dan en el día cuando la aduana funciona", dijo José Miguel González, presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Cúcuta.
La agencia estatal de noticias de Venezuela AVN informó el sábado que ese país cerraría su frontera con Colombia desde las 22h00 (02h30 GMT) hasta las 5h00 (9h30 GMT) para hacer frente al contrabando.
"Los traslados de un sector sensible como es el carbón también se dan en el día", así como la mayor parte del tránsito de personas que viajan a Cúcuta por negocios, agregó González.
Sin embargo, para los transportadores la decisión venezolana impactará su actividad "porque se van a generar demoras en el traslado de mercancías, lo cual genera para los propietarios pérdidas incalculables. Cada vehículo deja de producir un millón de pesos en promedio", señaló a Caracol Radio el presidente de la Cámara Nacional del Transporte, Ricardo Virviescas.
Los vehículos, al quedar "paralizados" durante la noche, generan "pérdidas en los consumos de combustible, en el mantenimiento del carro, en el costo directo de los conductores, en los hoteles, los parqueaderos", añadió Virviescas.
Según el gobierno de Nicolás Maduro, el tráfico ilegal de mercancías hacia Colombia es causante de la escasez de víveres en Venezuela.
De acuerdo con cifras estatales venezolanas, el contrabando abarca 40% de los productos básicos, además de 100.000 barriles diarios de petróleo, equivalentes a pérdidas anuales de 3.650 millones de dólares.
En el contrabando también influye el tipo de cambio: la mayoría de los alimentos y productos básicos en Venezuela están estimados a tasas oficiales de entre 6,30 y 11,00 bolívares por dólar, mientras que en el mercado negro el dólar supera los 70 bolívares.