Gobierno argentino pide a la oposición que respalde proyecto de pago de deuda

El proyecto obtuvo ayer dictamen favorable en el plenario de la comisiones de Presupuesto, de Finanzas y de Poderes, Peticiones y Reglamentos de Diputados, en una reunión de la que participó el ministro de Economía, Axel Kiciloff, quien fue a defender la propuesta. Los bloques del PRO, FAP, FR y la UCR anticiparon que rechazarán la iniciativa.

Esta mañana, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, pidió a los legisladores opositores que "decidan por el país" y respalden el proyecto. "Si 124 países en la ONU han respaldado a la Argentina, quiere decir que Argentina tiene razón en sus reclamos", subrayó en referencia al apoyo por parte de la ONU para la creación de un marco legal para la reestructuraciones de deudas soberanas.

Por su parte, el diputado nacional del PRO Federico Pinedo aseguró que si el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, llegara a ser presidente propondrá la derogación de la ley de pago soberano porque, afirmó, "es indispensable dar al mundo la señal de que la Argentina es un país que cumple con sus obligaciones".

"La intención de Griesa es presionar a Argentina para que pague a los buitres", dijo el titular del Palacio de Hacienda durante una entrevista por radio América, en la que destacó que "finalmente Argentina pagó y todo ese escándalo de que iba a haber default, aceleración de la deuda, que iban a venir todos los acreedores a buscarnos, no pasó nada".

"Cuando Argentina pagó, lo que hizo Griesa fue no dejarle cobrar a la gente. Entonces a Griesa se le armó una romería de diferentes reclamos, de bonistas que no cobraron, de bancos que no saben qué hace con la plata. Armó un desconcierto tal, que va llamando a audiencias, pero no resuelve", remarcó y aseguró que "la intención de Griesa hasta ahora es presionar a la Argentina para que le pague a (Paul) Singer, el buitre mayor, que pagó monedas por los bonos y ahora hay que darle U$S 800 millones".

En su criterio, avanzar con el cumplimiento de la reestructuración de la deuda "es un desafío muy importante que hay de acá a fin de año" que, estimó, "está bien encaminado".

La propuesta impulsada por la Argentina para crear un marco legal para la reestructuración de las deudas soberanas fue aprobada por 124 países, con la oposición de 11 países, entre ellos Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemani y Japón, y 41 abstenciones, como las de España, Grecia y México. De esta manera, el organismo internacional resolvió que deberá trabajar y definir esa reglamentación antes de septiembre de 2015, cuando termine su próximo período de sesiones ordinarias.

Ayer, luego de la votación en el recinto de Naciones Unidas, el canciller Héctor Timerman celebró el resultado y sentenció: "Los países no se pueden permitir un escenario en el que la reestructuración de la deuda quede a la discrecional voluntad de especuladores".

Además, Timerman, durante su discurso, reflexionó: "Si la ONU fue capaz de regular hasta los aprovechamiento de los recursos marítimos, cómo no podríamos decidir lo que hoy hemos decidido".