En el cuarto de atrás, donde se guardan
Las cosas que quedaron del pasado,
Y no nos animamos a destruir.
Alli dormía
El recuerdo feliz de aquellos dias.
Pasó, como pasaron tantas cosas,
Todo aquello que se llevó la vida.
Pero jirones, trazas y fragmentos,
Se guardaron por algo
Inexplicable para todo pensamiento.
Y alli se refugiaron,
En el cuarto de atrás, de lo pasado,
Entre algunos juguetes inservibles
Antiguos cuadros despintados.
Hoy, sin buscarlo.
Sin desearlo siquiera,
Desde el cuarto de atrás de mi memoria,
Como por mágico decreto, retornan tu recuerdo, tu figura
Y aquella vieja historia,
Como la dulce emoción y la ternura
De aquel amor secreto.
José Nemorivsky