Hoy me desperté,
las rígidas ramas golpean sin cesar las ventanas,
suena mi despertador.
Me hundo en tus recuerdos que embellecen las frívolas mañanas.
Se han secado, como las hojas caídas,
las lágrimas que hace tiempo derramé.
Pues ya no te amo,
pero hubo un tiempo en que te amé.
Amé cuando callabas,
porque era cuando más escuchabas mi voz,
amé el momento contigo,
porque sólo existíamos los dos
amé cuando te alejabas,
porque estábamos siempre juntos
amé cuando me eras sincera
porque era tu amor más profundo
ya no te amo es cierto, ¡Pero cuánto te amé!
Débiles y finas lágrimas se me escapan,
como aquella bella mariposa que poso en mi mano
y se fugó al ser espantada por mis gotas de nostalgia
amé cuando me dejabas y seguías a mi lado,
porque yo sentía tu calor, sabía que no te habías alejado
ya no te amo es cierto, ¡Pero como te extraño!
Amé cuando llorabas,
porque era yo quien te consolaba
amé cuando en mi creías
porque te inventaba un mundo de ilusiones y de la mano te llevaba
amé cuando me hablabas,
porque no sólo habría mis oídos, también habría mi corazón
amé cuando te arrepentías y volvías a mí,
porque me encantaba escuchar de tus labios… Perdón
ya no te amo es cierto, ¡Pero como te necesito!
Desconozco autor
|