Nada
Nada inspira el alma
para escribir un verso.
Ni la gris madrugada.
Ni el azul universo.
Ni el árbol que se queja
por sus ramas caídas...
Ni la hojarasca seca
en las hierbas dormidas...
Ni la risa de un niño,
ni la canción de un ave...
Ni un mentido cariño...
Ni una caricia suave.
Ni el temblor de la brisa
por sobre la enramada...
Ni la terrible ausencia
de la mujer amada…
(Oscarj)