La liberación del ex guerrillero Julio Enrique Lemos ha puesto fin a la "luna de miel" entre la nueva administración norteamericana y Colombia.
El miércoles pasado, el embajador de EE.UU. en Bogotá, Kevin Whitaker, envió una dura carta al Presidente colombiano, Juan Manuel Santos, para criticar la liberación de Lemos por considerar que no tomó en cuenta la presunta vinculación del ex guerrillero en el secuestro de un ciudadano estadounidense.
Washington había solicitado la extradición de Lemos, quien enfrenta un proceso judicial en un tribunal de Nueva York, pero la máxima Corte de Colombia exigió su inmediata liberación el pasado 31 de mayo porque el ex guerrillero decidió acogerse a la Justicia Especial de Paz.
No se cuestionan
Este viernes, en un acto público, el presidente Santos rechazó las opiniones en contra de los fallos que emite la justicia y pidió el apoyo "de todo el país y de toda la comunidad internacional", sin hacer alusión directa a Whitaker.
"Los fallos que ustedes emiten, en cumplimiento de la Constitución y de los acuerdos, deben tener el respaldo de todo el país y de toda la comunidad internacional. Nosotros siempre hemos dicho que acatamos los fallos de la Corte y siempre los acataremos y esos fallos no pueden ser puestos en tela de juicio ni por nacionales ni internacionales", dijo Santos, citado por El Espectador.
Este 'impasse' es el primero entre Santos y la administración de Donald Trump, a poco menos de un mes de la reunión que sostuvieron en la Casa Blanca. En la misiva de la discordia, EE.UU. dijo que si bien han estado de acuerdo con el proceso de paz, el fallo sobre Lemos sienta un "precedente preocupante y peligroso" para la relación bilateral.
La oposición política a Santos también criticó severamente la decisión de la Corte: "Julio Enríque Lemos, Alias Nader, terrorista Farc, debe ser puesto preso y extraditado", escribió el ex mandatario y líder del Centro Democrático, Álvaro Uribe Vélez.
¿Quién es Lemos?
Según El Tiempo, Lemos fue capturado el pasado 23 de febrero en una área rural de Medellín, fuera de la zona veredal correspondiente, porque asistía a citas médicas con permiso los organismos encargados de monitorear la desmovilización guerrillera.
La aprehensión ocurrió por la solicitud de extradición que pesa sobre Lemos, pero los magistrados de la Corte ya habían resuelto otorgarle la libertad plena por acogerse a la jurisdicción especial de paz. Según un decreto del gobierno emitido en mayo, quienes se sometan a ese marco legal quedan exentos de ser juzgados fuera de Colombia, "trátese de delitos amnistiables" o no.
A finales de mayo, el presidente de la Corte, Eugenio Fernández Carlier, explicó que la decisión de mantener a Lemus capturado perdía vigencia porque la Justicia Especial de Paz impide tomar medidas de aseguramiento con fines de extradición por hechos "ocasionados y ocurridos con ocasión del conflicto armado interno", precisa Semana.
"No podemos seguirlo teniendo privado de la libertad por conductas cometidas antes del acuerdo", dijo entonces el magistrado respecto al caso del ex guerrillero, a quien se le imputan delitos presuntamente perpetrados en 2009.