Los dos tenistas con más títulos de la historia siguen acumulando trofeos cumplidos los treinta. Rafael Nadal ganó ayer Roland Garros con 31 años; Roger Federer hizo lo propio en Australia con 36. El español suma 15 títulos de Grand Slam y el suizo 18, más que nadie desde que en 1968 arrancase la Era Open. Les siguen Pete Sampras con 14 títulos y Novak Djokovic con 12. Se esconde ahí un hito asombroso: tres de los cuatro más grandes están en activo. Federer, Nadal y Djokovic. Tres tenistas voraces coinciden en el tiempo y permanecen.
Mucha gente se pregunta qué palmares tendrían Federer o Nadal si no hubiese existido el otro. ¿Cuántos títulos tendría el suizo si el español no hubiese reinado en Roland Garros? ¿Cuántos tendría Djokovic sin los otros dos? Pero puede argumentarse justo lo contrario, que fue esa competencia brutal y sin sentido lo que elevó al absurdo las estadísticas de los tres. Quizás Federer se hubiese marchitado antes si no tuviese delante a rivales que además del presente le disputaban la historia.
A la sombra de estos tres jugadores apenas crece nada. Puede verse en este otro gráfico: hace trece años que Nadal monopoliza Roland Garros, dejando solo tres títulos para todos los demás. Migajas.
Nadal, Federer y Djokovic tiene los tres más de 30 años. Su supervivencia produce otro hecho insólito: desde hace una semana los cinco mejores tenistas del mundo tienen más de 30 años. No hay precedentes en toda la Era Open. Hubo momentos con tres casos —Federer, Wawrinka y Berdych en 2015; Federer, Wawrinka y Nadal también en 2015; y Newcombe, Okker y Laver en 1974—, pero nunca los cinco mejores habían tenido 30 años cumplidos.
El récord ha venido por envejecimiento. Hace un mes eran tres los tenistas del top 5 que superaban los 30 años: Federer, Wawrinka y Nadal. Pero el 15 de mayo se les unió Murray, y una semana después, Djokovic. Los dos cumplieron 30 años este mes.
Esta tendencia no es casualidad. El top 5 lleva envejeciendo desde 2011 y su edad media ha pasado de rondar los 25 años a casi alcanzar los 32. La tendencia no se debe solamente a la tozudez de Federer, Nadal y compañía. Es algo general. Se observa también si miramos los 100 primeros del ranking ATP. Su edad media lleva aumentando desde 2003 y ha pasado de 25 a 29 años. En 2016 había 39 jugadores con más de 30 años entre los 100 mejores, por los 10 que había en 2003.
Solo puedo especular sobre las razones de esta transformación. De alguna forma una generación de tenistas se está beneficiando de la edad y a la vez mitigando sus efectos negativos. Sabemos que ocurre también con las mujeres —lo cuenta Carl Bialik, y ahí está Serena Williams, ganando títulos con 35 años. Es probable que los tenistas tengan una mejor preparación física y que eso les permita preservar su talento. Quizás el tenis moderno ha cambiado o el funcionamiento del circuito profesional pone incentivos para seguir compitiendo. también puede haber algo de casualidad en la falta de estrellas jóvenes. Hoy no hay ningún jugador con menos de 20 años entre los 50 mejores. Nadal era el quinto del mundo cuando ganó su primer Roland Garros con 19 años.