Las elecciones presidenciales del 20 de mayo en Venezuela ocurrirán en un escenario de anuncios de no reconocimiento de los resultados y bloqueos financieros internacionales que mantienen en alerta a las autoridades.
En este contexto, el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino López, encabezó esta semana una reunión junto al ministro de Interior, Justicia y Paz, Néstor Reverol, y el canciller Jorge Arreaza, para evaluar planes de control del orden interno del país.
Ofensiva híbrida
No es la primera vez que la máxima autoridad militar de Venezuela se refiere a estas amenazas contra la nación latinoamericana.
Durante su participación en la VII Conferencia de Seguridad Internacional en Moscú, Vladimir Padrino López precisó que en su país se registra "un caso de descarado intervencionismo", porque Venezuela se ha "convertido en un objetivo lucrativo para el gobierno de EE.UU.", según una nota de prensa del ministerio de defensa de ese país.
- Guerra económica.
- Bloqueo y persecución financiera.
- Amenazas de embargos petroleros.
- Obstaculización de compra de alimentos y medicinas.
- Guerra mediática (posverdad y manipulación de redes sociales).
- Difusión de la tesis del Estado fallido o forajido.
- Financiamiento de organizaciones no gubernamentales y partidos políticos para fracturar el orden interno.
- Amenazas de intervención militar.
Todo ese panorama involucra, según el ministro, "acciones de paramilitarismo y terrorismo" que pretenden generar "un incidente" capaz de detonar "una guerra civil”.
A favor o en contra
Consultado por este medio, el general Edwin de la Fuente, excomandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Bolivia y experto militar, apuntó que las acciones de injerencia denunciadas por Caracas forman parte de un proceso ampliamente estudiado y que se define como "escalada del conflicto".
Para el experto, "todo nace de la amenaza que EE.UU. hace al mundo entero: o están con nosotros o en contra de nosotros", y solo cuando un país no acepta "dócilmente" las imposiciones políticas, "comienzan a efectivizarse las amenazas".
Según el exmilitar boliviano, durante el desarrollo de acciones contra un gobierno, que la Casa Blanca declara hostil, "EE.UU. emplea un doble discurso", que se balancea entre "lo legal y lo ilegal, de acuerdo con su conveniencia".
Para De la Fuente, dentro de ese balanceo "la oposición puede hacer de todo y se considera legal, legítimo". Mientras que el gobierno "en defensa del Estado democrático no puede hacer nada, ya que sus acciones serán calificadas de ilegales y antidemocráticas", como ha ocurrido en la diatriba EE.UU. - Venezuela.
Segunda fase: intervención
Una vez que el gobierno hostil a Washington es debilitado, "viene la segunda fase de la estrategia: la intervención", dice el experto.
Así, comienzan con "sanciones económicas", añade el excomandante, acusando "a la nación de violar los derechos humanos aunque las sanciones económicas afecten principalmente a los pueblos", ya que lo importante es "destruir la base social del partido gobernante".
En ese momento, "las condiciones estarán dadas para una intervención militar, a pedido del mismo pueblo 'sufrido' y con el reconocimiento de la llamada comunidad internacional", detalla el experto militar.
El general Edwin de la Fuente asegura que "el único fin que persigue EE.UU. es el petróleo venezolano", pero que esa batalla les ha resultado dura a varios de sus presidentes porque "la Fuerza Armada Militar Bolivariana está sólidamente formada política e ideológicamente".
Ataque militar
Julio Chávez, integrante de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), tiene una lectura política acerca de las "inminentes amenazas" descritas por el ministro de la Defensa de Venezuela. "Se pretende impedir que nuestro pueblo acuda a votar en las presidenciales del 20 de mayo, mediante la generación de miedo, zozobra e incluso violencia", dijo el constituyente.
Detalló que las amenazas y los pronunciamientos de varios gobiernos de la región, y fuera de ella, en contra de Venezuela, "intentan deslegitimar el venidero proceso electoral, en que la oposición participará con todas las garantías que establece el ordenamiento jurídico".
Refiriéndose a los países que ya han declarado que no reconocerán el resultado de la elección para presidente, Julio Chávez expresó que "ningún país tiene el derecho de desconocer la voluntad del pueblo venezolano".
Por último, el constituyente denunció que "desde Colombia se está preparando una agresión militar contra Venezuela" en los días previos a las presidenciales del 20 de mayo. "Esa es una de las amenas inminentes", concluyó.
Ernesto J. Navarro