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General: COMER EN FAMILIA
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Resposta  Missatge 1 de 3 del tema 
De: SILA4141  (Missatge original) Enviat: 24/01/2019 18:39
COMER EN FAMILIA

Comer, como tantas otras necesidades de nuestro cuerpo, se puede
satisfacer de varias maneras: a solas, como mera necesidad
fisiológica; socialmente, ajustándose a las normas de la urbanidad;
finalmente, en familia, como cristianos, como conviene a hijos de
Dios que saben y confiesan que el Padre del cielo es quien nos da el
pan nuestro de cada día.

Comer es una necesidad de nuestro organismo. La auténtica tradición
judeocristiana le encontrará a la necesidad orgánica de comer una
forma que satisface los tres niveles: el orgánico, el social y el
cristiano: comer en familia. Es casi un sacramento, vale decir,
una forma de hacer presente a Jesús resucitado en medio de nosotros.
Comer en familia, al menos una vez al día, eleva esa necesidad
material de comer a un acto social y cristiano; se convierte en una
sinfonía de arpegios y melodías prácticamente celestiales. Comer en
familia: no se trata ya de un acto privado y egoísta de engullir
rápidamente los alimentos como quien en contados minutos llena el
tanque de su automóvil, sino de poner en artística ejecución a la
orquesta más humana y divina que haya creado Dios: la familia. El
comedor era, y debería volver a serlo, el lugar más importante de la
casa. El centro del hogar, que recoge bajo un mismo techo y
alimenta con un mismo pan a todos los miembros de una familia.

La vida moderna, con sus distancias entre oficina, colegio y hogar;
sus múltiples faenas y ruidos, su caótica escala de intereses, acaba
con el comedor, con la comida en familia y, lamentablemente, va
acabando hasta con la familia.

Cada hogar, si quiere volver a ser tal, deberá imponerse el deber de
sentarse todos los días a la mesa, por lo menos una vez al día y,
ciertamente, en fin de semana. Todos sentados al tiempo, sin
afanes, radio, televisión ni computadora prendidos, sin partidos de
fútbol, prensa ni revista que distraigan la atención ni el ritmo de
la vida en familia. Todos sentados a la mesa aprendiendo cultura y
urbanidad, oyendo las tradiciones familiares, y oyéndose mutuamente
lo que cada uno hace, sufre y goza.

Allí, sentados a la mesa, se deben hacer las deliberaciones y tomar
las grandes y pequeñas decisiones de familia. Así, los hijos
aprenden a deliberar y decidir, y a caer en la cuenta de que son
importantes en la familia. La vida en familia da seguridad a los
hijos, los aparta de los vicios y las malas compañías, les ayuda a
despejar sus dudas religiosas y morales, les compensa las fatigas
del día.

Recueden como fuimos educados los que ya peinamos canas. Comimos
juntos y crecimos juntos. Al calor de los "viejos" bebimos
tradiciones, cultura y amor. Comimos y oramos juntos antes de
lanzarnos a la vida, como hombres, a cumplir la misión que nos
asignó el Señor. Jamás se nos ocurrió la fuga hacia el licor, la
droga, la calle o la perdición. El hogar, el dulce hogar, nos educó
y nos defendió.

Padres de familia: si quieren formar hijas e hijos seguros, libres
de todo mal, educados y valiosos... ¡vuelvan a comer en familia


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Resposta  Missatge 2 de 3 del tema 
De: RADIOPIPOLLSINFRONTERA Enviat: 24/01/2019 18:44

 Buenas Tardes
Amiga del Alma

        

                                                    
                                      102.5 Fm Radio Pipoll Sin Fronteras


Resposta  Missatge 3 de 3 del tema 
De: alondra@ Enviat: 25/01/2019 02:02


 
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