Del vinculo con tu madre aprendes a amarte o no a ti misma
.
“Si tu madre nunca te ha consolado,
con toda probabilidad te será difícil encontrar un verdadero
consuelo para el corazón en las relaciones
que establezcas con otras personas.
Tu labor será crear ese sentido de consuelo
para el corazón dentro de ti misma.
Si tu madre nunca se ha compadecido de ti,
con toda probabilidad tendrás poca paciencia
con tus propios fallos humanos,
así como con los de los demás.
Tu labor será observar a alguien que practique la compasión,
y practicarla tú misma.
Si tu madre silenciaba tu creatividad.
Tu labor será dar voz a cada impulso creativo que se presente.
Pinta, escribe poesía, toca el tambor, cuida las plantas, cocina y baila.
Si tu madre despreciaba o rechazaba su propio cuerpo como mujer.
Tu labor es abrazar y honrar a tu cuerpo y a tu sexualidad.
Si te sentías abandonada por tu madre por la razón que fuera,
incluyendo la depresión o el alcoholismo.
Tu labor sera escuchar tus sentimientos
y nunca abandonarte tu misma.
Todos nosotros llevamos encima el peso de nuestra madre
por lo que es necesario sanar la ruptura madre/hija
tanto si tu madre está viva como si no,
para así poder sanar la profunda herida
de tu naturaleza femenina.
El elemento clave reside en que TU misma
te conviertas en una BUENA MADRE para ti misma.
Con esa idea en la mente,
asume la tarea de SER MATERNAL CONTIGO MISMA."