Lucho Herrera, Fabio Parra, Álvaro Mejía (4º en 1993), Santiago Botero, Mauricio Soler, Rigoberto Urán y hasta el propio Nairo Quintana, se rinden en elogios frente al cundinamarqués de 22 añitos que todavía no cree lo que ha logrado hasta el momento.
"Solo tengo ganas de llorar, esto es increíble, no lo puedo creer, espero no despertarme y que esto haya sido un sueño, la verdad solo quiero llegar a París, cruzar la línea de meta y ganar este Tour", dijo un Egan emocionado una vez se bajó del podio de los mejores vestido de amarillo líder.
Cuenta con el respaldo de su equipo. Sus compañeros lo respetan. En el Ineos, equipo que está diseñado para ganar esta competencia, saben que si administran la diferencia agarrada en la etapa 19, tendrán un nuevo Tour en su exitoso palmarés deportivo.
Sería la séptima conquista en los últimos ocho años. La cifra es escalofriante. A los nombres de los británicos Bradley Wiggins (2012), Chris Froome (2013, 2015, 2016, 2017) y Geraint Thomas (2018), se sumarían el del nacido en Zipaquirá, un hombre que brilló en el ciclomontañismo, pero que tenía su mira puesta en las grandes carreras del WorldTour.
Por lo pronto, este sábado Egan tendrá que sortear una difícil etapa que fue recortada debido a las condiciones meteorológicas. La fracción, prevista sobre 133 kilómetros, que se presentaba como la batalla final para decidir al ganador de la carrera, iba a salir de Albertville, para ascender el Cormet de Roselend (1ª) y la Cote du Longefoy (2ª) afrontar Moutiers, el ascenso de 33 kilómetros al Val Thorens (HC).