Deja que te hable de mis sueños
Que tras el tiempo se escondieron
Pero que contigo han vuelto.
Deja que te hable de mis sueños
Que con el tiempo se perdieron
Confundidos en el silencio
Sueño con los ojos abiertos
Puede que me creas que estoy loco
Porque me creo los sueños... (Jarabe de palo)
Los sueños nos hacen recordar, nos extrae cosas que ya la habíamos olvidado, sentimientos que siempre lo hemos tenido pero estaban dormidos, recuerdos que con el paso del tiempo los dejamos en una esquinita de nuestro cerebro y un día, sin más, nos llama diciendo... ¡Estoy aquí! ¡¿No me ves?!
Hay sueños, metas para alcanzar, hay sueños, ilusiones para vivir, hay sueños inalcanzables, castillos en el aire que el ser humano suele tener.
Los castillos en el aire, esos son con los que hay que librar esa batalla. Una batalla que surge cuando caes y te das cuenta que no era real, era un sueño inalcanzable.
Ahí es cuando empiezas a vivir tu realidad.
Es la lucha por ver lo que tienes, lo que posees y lo que debes aceptar. Tú la elegiste y nadie te obligó a ello, pero por un motivo, una pequeña chispa un querer vivir, tienes un sueño y sin darte cuenta te adentras en él, viviendo día a día ese sueño haciéndolo real, creyendo lo que piensas, dices, haces, sin pensar que en realidad es solo un sueño.
Los sueños son buenos, siempre hay que soñar, querer llegar a esa meta, desear lograr tus sueños, es necesario, pero no soñar una realidad inexistente.
Aferrarse a los sueños, desear llegar a esa meta, ese es el mejor sueño real que podamos tener y cuando lo logremos sentirnos satisfechos de nuestros logros.
Reconocer siempre vuestros sueños, sean reales o no, pero reconocerlos y así hallaréis el camino acertado en vosotros mismos.
Avanzar siempre hacia adelante y nunca retrocedáis porque eso os hará grandes y reconocer vuestros errores porque esos sueños se harán realidad en vosotros mismos y seréis más grandes como personas.
Despertar de ese letargo y ser felices con lo que tengáis, porque la vida es un sueño, un sueño real con sus más y sus menos, sus desgracias, felicidades, ansias, deseos, pero es un sueño real, donde cada día nos levantamos y hacemos realidad nuestras vivencias y el mañana será nuestro sueño para realizar.
Haced realidad los sueños día a día.
No dejes de sonreír incluso si estás triste
Porque no sabes quién podría enamorarse
De tu sonrisa.