Era 17 de diciembre de 2014. El pueblo todo, que luchaba y exigía su regreso, se convirtió en testigo de que se cumplía la predicción del Comandante en Jefe. Los Cinco, todos, ya estaban en su Patria.
Fue día de fiesta y de llantos. Estos últimos muy difíciles de contener ante tanta emoción. La televisión captó cada momento, desde que la nave aérea que traía a Gerardo, Antonio y Ramón se acercó al espacio de la terminal José Martí, en La Habana, hasta que se abrió la puerta y se asomó en la escalerilla Gerardo, luego Antonio y finalmente Ramón. ¡Cómo olvidar los abrazos de los héroes con sus familiares allí presentes! El abrazo emocionado de Raúl, que los esperaba en nombre de Fidel y de todo el pueblo.
Las convicciones se hacían realidad. Los Cinco, cumplidores de su deber con la Patria, sabían que el pueblo todo quería abrazarlos, que los niños se apresurarían a besarlos, que los jóvenes están más comprometidos por el ejemplo que irradian.
Cuando este martes 17 se cumplen cinco años de aquella feliz llegada a la Patria, los Cinco Héroes fortalecen su valía como patriotas y emprenden tareas, quizá menos arriesgadas, pero heroicas también, como profesionales que son, como revolucionarios de siempre, y como hijos de la Patria que se sabía incompleta cinco años atrás, cuando todavía ellos se encontraban en oscuras prisiones.
Supieron cumplir con dignidad aquellas largas e injustas condenas y siempre estuvieron seguros de que a solo unas 90 millas de aquel oscuro precipicio estaba un país todo movilizado para exigir su regreso, y un líder que, con la convicción y seguridad de siempre, había expresado: «Volverán». Y así Raúl lo cumplió.
Pero la batalla por el regreso de los Cinco, además de hacerse cada vez más masiva en Cuba, traspasó mares y océanos hasta convertirse en bandera, en un movimiento solidario llegado desde cientos de países, incluyendo Estados Unidos.
El regreso de Gerardo, Antonio y Ramón completó la felicidad de un pueblo que antes, el 7 de octubre de 2011, hizo suya la emoción de la liberación de René, y el 27 de febrero de 2014, la de Fernando.
Se trata de cinco jóvenes del pueblo, formados íntegramente por la Revolución, todos preparados para cumplir cualquier misión en favor de su patria.
Son hombres consagrados en la obra que construimos y siempre ponen por delante su fe en la victoria, la que acompañan de una noble y sincera sonrisa, propia de los héroes que son.