Nueve año después, el caso del asesinato de Luis Andrés Colmenares tiene muchas zonas grises. La investigación continúa su curso y al parecer hay nuevas pruebas de la Fiscalía que pueden demostrar que la muerte del joven guajiro no fue accidental.
El programa 4 Caminos del Canal RCN sacó a la luz varias de las pruebas que se manejan en el expediente y que esperan se determine la muerte de Colmenares como un asesinato.
Una de ellas es la poca credibilidad a la teoría del accidente. El ente acusador considera "ilógico" que un cuerpo arrastrada más de 125 metros, como argumenta la defensa, conserve la ropa intacta.
Las nuevas pruebas que confirmarían asesinato de Luis Andrés Colmenares
Otro de los nuevos indicios habla de la versión de Laura Moreno en su primer interrogatorio en la Fiscalía, una de las imputadas en el caso, en la que afirma se metió al caño El Virrey para ayudar a su amigo. La joven afirmó que el agua no le llegaba a 15 centímetros del tobillo, un caudal que no podría arrastrar a un cuerpo como el de Colmenares, de 70 kilogramos aproximadamente.
Además, los restos de pasto encontrados en la ropa de Luis Andrés son más esclarecedores. La defensa manifiesta que el joven fue arrastrado por el agua en el caño, algo que debió limpiar el pasto de su vestido. Por esto, el papá del fallecido cree que su hijo fue golpeado antes de ingresar al caño, asesinado y luego arrastrado al lugar donde fue encontrado.
Por si fuera poco, unas heridas demostrarían que Colmenares fue golpeado antes de "caer al caño". Ante todo, la desviación del tabique nasal al lado izquierdo daría poca veracidad a un golpe del cuerpo mientras era arrastrado por el agua.
Por último, los expedientes aseguran que Laura Moreno volvió al caño El Virrey dos días después de la muerte. Esto quedó constatado en unas llamadas salientes desde ese punto al norte de Bogotá desde su teléfono personal. Estas pruebas están en poder de la familia Colmenares, según el programa investigativo de RCN.
Además, para mostrar el accidente según ella recuerda sus tres recorridos enseñados son inconsistentes. Según la familia de la víctima, la jueza Teresita Barrera no tomó todas estas pruebas a la hora de dejar en libertad a Laura Moreno y Jessi Quintero.
El tribunal superior de Bogotá es quien debe decidir la culpabilidad de Laura Moreno y Jessi Quintero.