LA MALIGNA
Feliz se asoma a mi ventana
ella alegre y yo afligida
ella feliz y yo aterrada
me mira galante en la espera
sonriendo mi calamidad
en esta pandemia que agobia
Mi cuerpo un florero con rosas marchitas
rosas moribundas sin abrigo
hojas secas de un árbol añejo.
Flanquea mi vida /se extingue.
Me aferro, no me llevará.
Arranco mi miedo, mi frio
tengo que pasar
de la grieta a la espesura
de la espesura a la llanura
de la llanura a la esperanza.
Rescataré mi existencia
venceré a la maligna
su posición inclemente
la ahuyentaré de este mundo
seguiré el trayecto.
Lavaré mis manos, mi espíritu, mis acciones.
Cambiaré el pijama por mi vestido
el respirador por un aire nuevo
mi preocupación por esperanza
buscaré al prójimo con mi palabra.
Mis versos serán caricias
¡Volveré a nacer ¡
Miro el firmamento/ agradezco mi estadía
aprenderé a ser más humana.
En el paraíso de mis pensamientos,
logro escribir nuevamente
están las paredes impregnadas de mis letras
buscando tu escucha
sin miedos ni aflicciones /no me rendiré
¡la despediré ¡
Ella se irá sola y muy desconsolada
En el desierto de sus ilusiones.
ADBELU Ada Fernández