El presidente de EEUU, Donald Trump, pateó el tablero de los acuerdos multilaterales, como lo viene haciendo desde 2017, con la postulación de un estadounidense para presidir el BID, lo cual rompe el acuerdo fundacional entre los países miembros de que eso nunca ocurriría.
Hasta ese momento solo estaba en carrera el candidato argentino Gustavo Beliz, propuesto por el Gobierno de Alberto Fernández.
El pacto fundacional incluía que la sede estuviera en Washington a cambio de la presidencia para un latinoamericano y la vicepresidencia para EEUU.
El país norteamericano cuenta además con poder de veto pues posee 30% del capital accionario, y de votos dentro del directorio del organismo, donde fácilmente teje mayorías con apoyo de los países que comulgan con su política exterior.
Claver-Carone fue uno de los ideólogos de la autoproclamación de Juan Guaidó en enero de 2019 como presidente de Venezuela. Además organizó, entre otros ataques, el intento de invasión al país caribeño impulsado un mes después desde la ciudad de Cúcuta, Colombia, bajo el pretexto de la ayuda humanitaria.
Completito
"Este señor se desempeñó como director ejecutivo de los EEUU en el FMI, fue asesor principal para Asuntos Internacionales y abogado asesor en el Departamento del Tesoro de EEUU. En 2016 fue nombrado miembro del equipo de transición de Trump hasta que en 2018 fue nombrado asistente especial de Trump", completó Ramos el currículum de Claver-Carone.
En la actualidad es el director principal para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional. "Realmente tiene una hoja de servicio al imperio muy larga", enfatizó el entrevistado antes de mencionar otras facetas de su perfil.
"Fue director ejecutivo de Cuba Defiende la Democracia, una organización que busca una supuesta transición democrática en Cuba y en ese marco tiene una línea histórica de dura presión", dijo.
Esta organización fue fundada por el propio Claver-Carone en 2003, y le ha donado fondos a las campañas de los legisladores republicanos Marco Rubio y Mario Díaz-Balart, enemigos acérrimos de la Revolución Cubana.
Lobista declarado a favor del embargo a Cuba y de la política de sanciones profundizada durante la presidencia de Trump contra Venezuela y Nicaragua, todo indica que Claver-Carone implementará esas mismas prácticas desde la presidencia del BID.
Alineación sin balanceo
"Con la complicidad del Brasil de Jair Bolsonaro, que tiene 11,3% de los derechos de voto, sumado al 30% de EEUU es prácticamente un hecho que elegirán al candidato de Trump", pronosticó el director del Centro Andino de Estudios Estratégicos.
Ramos agregó que varios países ya se comprometieron a romper con la tradición y respaldar al candidato de Trump, entre los cuales se encuentran Colombia, Ecuador, Uruguay, Honduras, Bolivia y Paraguay.
El entrevistado vaticinó en este sentido que "la política será mucho más agresiva. No dará crédito a nadie que no esté alineado con EEUU y se aplicarán sanciones geopolíticas través del BID. Habrá un cruce de condicionalidades desde el BID y el FMI".
Asimismo, apuntó que "básicamente se financiarán proyectos de interés para los EEUU antes que proyectos de interés para los pueblos. Y la asistencia técnica, las famosas consultorías del BID, tratarán de reformar leyes, reglamentos institucionales y los modelos de gestión. Para los países que no se alineen vendrán las típicas sanciones de los EEUU", aseguró.
De acuerdo con Ramos, la decisión de Trump también obedece a la mayor presencia de China en la región y la necesidad de detenerla. "En este mundo multipolar y con este hegemón emergente que es China, que tiene sus propias instituciones financieras, la idea es cerrarle todas la puertas (...) y usar el BID como un instrumento para eso", concluyó.