Puedes hacer

Puedes ver, puedes sentir, puedes imaginar, y puedes crear. Puedes cuestionarte, puedes amar, puedes sorprenderte, y puedes comprender.

Es tanto lo que puedes hacer. Es tanto el valor que puedes generar a tu modo único y especial.

Cuando las circunstancias te hagan caer no tienes por qué quedarte tirado. Puedes levantarte y seguir avanzando con actitud positiva, una y otra vez.

Aquello que no sabes, lo puedes aprender. Aquello que necesitas tener, lo puedes encontrar o lo puedes crear.

Puedes forjar conexiones duraderas y plenas de sentido con los demás, multiplicando así fuertemente la riqueza de la vida. Puedes cooperar y colaborar y concretar magníficos logros.

La vida puede ser desafiante y complicada, y demandar mucho de ti. Eso constituye una enorme oportunidad, porque es tanto lo que puedes hacer.

— Gabriel Sandler

Enamórate del esfuerzo

Para hacer el esfuerzo de la mejor manera posible, enamórate de él. En lugar de evitar y dilatar y maldecir aquello que tienes que hacer, sumérgete en la tarea con gratitud y entusiasmo.

Si tienes que hacerlo, podrías también hacerlo de la manera más efectiva y creativa posible. En lugar de dar por sentado que cualquier tarea en particular resulta desagradable, encárala como la mejor de todas las cosas que podrías estar haciendo en ese momento.

Aquellos que asumen que el esfuerzo es una maldición se sienten constantemente abatidos por los esfuerzos que tienen que llevar a cabo. Quienes ven al esfuerzo, cualquier esfuerzo, como una bendición terminan siendo realmente bendecidos por ellos.

Es tu decisión, así que toma la más inteligente, sabia y estimulante. Decide aceptar, disfrutar y amar el esfuerzo y cosecharás enormes beneficios por llevarlo a cabo.

La capacidad de marcar una diferencia poniendo manos a la obra es un elemento crucial en la vida. Decide regocijarte con cada oportunidad que la vida te presente.

Suelta las quejas, las auto-compasiones, los sentimientos de frustración y enamórate del esfuerzo. Enamórate del esfuerzo que pones en vivir la vida, y descubre cuánto amor te devuelve a cambio.

— Gabriel Sandler

La vida es siempre ahora

Todo gran logro que alguna vez fuera conseguido, fue alcanzado de a un momento a la vez. No hay otra manera.

Los momentos pequeñitos, aparentemente insignificantes de cada día son los ladrillos con los cuales se construyen la grandeza y la realización. Cuanto más respeto brindes a cada uno de tus instantes y cuanto más presente estés en cada uno de ellos, más rica y plena será tu vida.

Las oportunidades no llegarán algún día, en algún difuso y distante futuro. Están aquí y están ahora.

Esta hora, en este día, podría sentirse apenas como un pequeño pedacito de tu vida. Se trata, sin embargo, de la parte más importante porque es la que ahora mismo estás viviendo.

La alegría que postergas para más tarde es alegría que jamás tendrás el placer de experimentar. El trabajo que postergas para otro momento es trabajo que nunca será llevado a cabo.

La vida es siempre ahora, así que vívela siempre ahora. La máxima expresión de la riqueza de la vida existe ahora, así que haz que sea tuya.

— Gabriel Sandler

Crea

A partir de las posibilidades que se te presentan, puedes crear. A partir de aquellas cosas que creas, surgen muchas más posibilidades.

Puedes tomar lo que es y convertirlo en algo que nunca haya sido antes. Comenzando con tan sólo una idea, puedes crear objetos, expresiones y experiencias que fluyan a partir de aquella idea.

Con lo que eres capaz de crear, puedes marcar una diferencia positiva y plena de sentido en tu mundo. Con aquello que creas, puedes aportar enorme realización a tu propia vida y a las vidas de quienes te rodean.

La inmensa capacidad de crear no tiene límites. No importa cuánto valor hayas creado hasta aquí, siempre habrá más esperando ser creado por ti.

En un interminable proceso de creación, la vida siempre se está renovando. Con tu propia vida puedes hacer lo mismo.

Con tu tiempo, con tus pensamientos, con tus esfuerzos y recursos, crea. Siempre hay manera de dar vida a más sentido y a más riqueza.

— Gabriel Sandler

Participa de la abundancia

Deja de pensar en las cosas que necesitas y concéntrate en las cosas valiosas que podrías hacer con aquello que ya tienes. La abundancia es algo real y que está presente en tu vida, así que date el permiso de verla, aceptarla y aprovecharla en plenitud.

Deja de anhelar que la vida fuese fácil y empieza a trabajar para generar grandeza y plenitud a partir de los verdaderos obstáculos que tan difíciles se presentan. Aquello que inviertes en tu vida es lo que hace que vivirla valga tanto la pena.

Participa de su abundancia, convirtiéndola en valor que tenga sentido a través de tus pensamientos, acciones y compromisos. Se una parte esencial de su belleza expandiéndola e intensificándola a partir de la manera en que vives cada instante.

Es buscando dar lo mejor de ti que descubres y desarrollas y conectas con lo mejor que yace en tu interior. Es usando adecuadamente y con sentido la abundancia de la vida que obtienes acceso a más y más de ella.

Siempre hay algo valioso que puedes hacer con lo que sea que tengas a tu alcance. Sea donde sea que puedas estar, sean cuales fueren las circunstancias que te rodeen, tu mejor alternativa es, siempre, trabajar diligentemente por marcar una verdadera diferencia.

Participa de la abundancia de la vida trabajando creativa y persistentemente con lo que sea que tengas a tu alcance. Descubre la dulce y verdadera realización que proviene de dar lo mejor de ti.

— Gabriel Sandler

Moverte con lo que tienes

Este momento está aquí, la situación es la que es, así que acéptala tal como viene. Tu mejor opción es adoptar una actitud positiva y entusiasta, y seguir avanzando con aquello que tienes.

Anhelar, quejarte, protestar y guardar rancor no hará mucho más que hacerte perder el tiempo. En cambio, aprovecha ese tiempo para usar aquello que tienes a tu disposición y para hacer que las cosas mejoren.

Tus metas y tus sueños son demasiado importantes como para postergarlos hasta que las condiciones sean perfectas. Acepta las condiciones tal como son, y ocúpate ahora mismo de hacer que esos sueños se hagan realidad.

Son muchas las cosas que podrían distraerte, y poner excusas perfectamente razonables a partir de aquellas distracciones sería muy fácil. Pero tú puedes decidir en cambio, concentrarte en la tarea que tienes entre manos, utilizando tus persistentes esfuerzos para crear aquello que deseas a partir de lo que tienes.

Avanza con lo que tienes a tu alcance, desde donde sea que te encuentres, con la poderosa pasión de tu auténtico propósito. Y podrás terminar donde sea que decidas.

— Gabriel Sandler