Salio ayer de mi alma,
al recordar esas tantas
locuras que hicimos que
aún llevan tu nombre,
y apellido.
Sin ti, el invierno
de mi alma es más frio
y arrasador que cualquier
mal tiempo que halla pasado.
Se congelaron mis sentidos,
paso afuera el tiempo,
pero inmovil se quedarón
en mi los recuerdos.
Estos que me cohiben de vivir,
desde que te has marchado.
Asi, pasan los dias,
a diario veo llover
dentro de mi, esas emociones
que se quedaron oprimida
en mi pecho.
Aquellas palabras
que nunca te pude decir,
permanecen alli tambien.
Una profunda soledad
sacude esta alma desahusiada,
que muere cada dia
un poco más.
Tú aúsencia se me nota,
ya no soy sin ti
la misma.
Hoy, hay lagrimas
donde ayer habían
sonrisas.
y donde hubo pasión
hoy sustituye ese sentimiento,
una rabia que me consume.
Se convirtieron en ahnelos,
y esperanzas falsas,
el deseo de verte de nuevo.
Esta mañana amanecio
otro dia más sin ti,
y al suspirar al viento,
veo tan lejano como cielo,
la posibilidad de tenerte
a mi lado de regreso.
De Una Mente Joven