- Nunca me dices adiós
- Así es.
- ¿Por qué? ¿Tan poco me quieres?
Por que te quiero, por que te amo, precisamente por eso, no te digo adiós. No quiero perderte, y si me despido tal vez te lo creas y no vuelvas.
No quiero que el destino nos tome en serio cuando nos decimos adiós y nos separe para siempre. No quiero perderte.
Prefiero decir un hasta mañana, o hasta luego y así si nos separamos, siempre quedará dentro de mi corazón la esperanza de volver a vernos algún día.
Ha habido muchas despedidas en mi vida y no quiero que formes partes de ellas.
Hasta luego mi amor.