LA FALTA DE PERDON...
La falta de perdón es como un veneno que tomamos diario a gotas, pero que finalmente nos termina envenenando.
Muchas veces pensamos que el perdón es un regalo para el otro, sin darnos cuenta de que los únicos beneficiados somos nosotros mismos.
El perdón es una expresión de amor.
El perdón nos libera de ataduras que nos amargan el alma y enferman el cuerpo.
No significa que estés de acuerdo con lo que pasó, ni que lo apruebes.
Perdonar no significa dejar de darle importancia a lo que sucedió, ni darle la razón a alguien que te lastimó.
Simplemente, significa dejar de lado aquellos pensamientos negativos que nos causaron dolor o enojo.
El perdón se basa en la aceptación de lo que pasó. La falta de perdón te ata a las personas con el resentimiento. Te tiene encadenado.
La falta de perdón es el veneno más destructivo para el espíritu, ya que neutraliza los recursos emocionales que tienes.
El perdón es una declaración que puedes y debes renovar a diario.
Muchas veces, la persona más importante a la que tienes que perdonar es a ti mismo, por todas las cosas que no fueron de la manera en que pensabas.
La declaración del perdón es la clave para liberarte.
¿Con qué personas estás resentido? ¿A quiénes no puedes perdonar? Perdona para que puedas ser perdonado, recuerda que con la vara que mides, serás medido...
Aliviana tu carga y estarás más libre para moverte hacia tus objetivos.
ESKARLATA