El desierto es menos árido con la presencia de tus pasos.
Tu alma necesita que tu cuerpo siga en pié para seguir inspirando. Las dudas no están para inmovilizarte, sólo para que medites los pasos que vas a dar. ¿Está tu corazón orientando las decisiones o es el miedo quien impulsa tus movimientos? Que todavía no veas que otros crucen los puentes, no significa que te hayas equivocado al construirlos. Vine a confirmarte lo que bien intuís, tus huellas mostrarán nuevos caminos hacia un mundo más humano.
La lógica es la excusa de la razón para demostrar que está en lo cierto. Que tus acciones puedan parecer ilógicas para aquel que está acostumbrado a guiarse por la mente, no significa que hayas errado el rumbo. Siguiendo la sabiduría de tu voz interior, fluirás con la existencia y animarás, con la pasión de tu servicio, a que otros también co-creen un entorno más armónico, cálido y resplandeciente.
Por más que te movés en la misma realidad que los demás, mirando las mismas paredes, las mismas veredas y las mismas calles, sabés que tus pasos se mueven en una dirección más profunda, hacia el centro mismo de tu verdadera esencia. Los puentes que construiste, en dirección al corazón, fueron hechos por amor; así que será el amor quien impulsará a que otros, muy pronto, los crucen.
¿Escuchás lo que están diciendo los ángeles? Se acercan tiempos de re-encuentro y celebración. La tarea realizada no tardará en rendir sus frutos. Gracias por Ser y por estar, eterno amigo peregrino. Seguí inspirando con tu decidida entrega. Amo tu entereza. Celebro tu constancia. No lo olvides: la vibración de tus huellas mostrará nuevos caminos, para todo aquel que busque llegar al corazón.
Julio Andrés Pagano