Por Javier Esteban
“A aquellos que pudieron amar más allá del seductor reclamo del cazador, del pérfido brillo de la fijeza, de la adorada ilusión de su propio reflejo.”
Así dedica su libro el joven psicoanalista Jorge Marugán, profesor del Máster de Psicoanálisis de la UCM y buen conocedor de Lacan. Esa dedicatoria para amantes abre las páginas de un viaje al mismo existir y desear del fundador del psicoanálisis. Por mucho que tratemos de asimilarlo, Freud no deja de provocar sorpresa en la cultura. La fortaleza del genio y su vigencia se refleja en la incesante investigación y polémica que su vida e ideas provocan.
El maestro de la sospecha es estudiado esta vez desde un prisma diferente: la mirada indiscreta y psicoanalítica sobre de sus relaciones afectivas con sus colaboradores más estrechos como Fliess o Jung, o su identificación con Leonardo Da Vinci. El deseo de Freud se deja ver y se esconde a través de correspondencia y los textos que analiza con originalidad y claridad expositiva Marugán.
No sabemos muy bien qué sea eso del deseo homosexual, ni la trascendencia que a estos efectos pueda tener el haberlo realizado pero, por el camino, Marugán efectúa una investigación que conduce directamente a las relaciones de Freud con la feminidad, la represión, la mujer como tabú, la propia paranoia y la bisexualidad.
En este libro aprenderemos algo de la condición de ese sujeto de deseo llamado Freud, pero sobre todo de la condición humana. El autor cierra su ensayo con una interesante reflexión sobre la orientación sexual, tema siempre escurridizo. Estamos ante una obra que interesa más allá de los círculos psicoanalíticos.