como la cima helada de los montes
como el abismo negro de las minas
como elefante herido ante la muerte
Y me quedaré sola...
se irá la luz de mi horizonte rosa
se irá el rumor azul del mar y el cielo
se irá lenta la vida en el ocaso
Y me quedaré sola...
con el recuerdo gris enardecido
con púrpura extravío embriagador
con tristeza amarilla en mi hondonada
Y me quedaré sola...
entre viejos papeles inservibles
entre ruinosos fúnebres retratos
entre añejas reliquias de la nada
Y me quedaré sola...
sintiendo la crudeza del invierno
sintiendo el corazón a fuego vivo
sintiendo agonizar las esperanzas
Y me quedaré sola...
sin días en mi insulso calendario
sin martirio y placer en el futuro
sin savia circulando en las arterias
Y me quedaré sola...
con la mirada huyendo del paisaje
con el peso excesivo del pasado
con tantos sueños rotos sin destino
Y me quedaré sola...
Emma-Margarita R. A.-Valdés