...estarás vieja y fea".
Un
día leí estas dos grandes verdades… (No recuerdo exactamente dónde fue)
Pero pensé si me lo dijeras a mi, le pediría a Dios que te escuchará,
para que así me permitiera llegar a esos años llena de salud, con esas
huellas en mi rostro, con esos hilos de plata en mis cabellos, en
realidad lo demás es secundario en lo personal no me importa, ni me
ofendería, por que así como te ves ahora un día me vi yo… Así como se
ve esa persona mayor, “quien sabe si tú y yo lleguemos a vernos”, él
tiene la fortuna de gozar de esos años, nosotros no sabemos, aún no lo
sabemos…
Cada año que pasa puedo notar que mi vitalidad ya no es
la misma, que mi vista poco a poco se comienza a cansar y, en mi
cabellera comienzan a caer gotas de nieve. La naturaleza no deja de
pasarme la factura, el tiempo no perdona. La belleza artificial que es
agradable a los ojos de nuestros semejantes, al tacto, solo es
superficial y en ocasiones de nada sirve si no se tiene belleza
interior.
La tecnología nos ofrece un sin fin de productos para
retardas los efectos del envejecimiento y, claro que dan buenos
resultados. ¿Por qué no ofrece cremas y lociones para el alma? ¿Existe
un manual para ser un buen ser humano? Creo que aún no se inventa nada
por que eso no entra por letras eso se aprende en nuestro hogar, de las
personas que viven en nuestro entorno y en el ambiente en el que nos
desenvolvemos desde pequeños.
Creo que es bonito ser vanidoso y
sentirse guapo para uno mismo, no necesariamente nos tenemos que
arreglar para alguien en especial. Pero más me gustaría tener la virtud
de poseer esa belleza interior que solo los ojos del corazón son
capaces de percibir, sí esa que perdura por más tiempo , que provoca
alegría profunda y duradera, que nos permite adquirir sabiduría para
aceptar sin contratiempos el paso del tiempo.
La belleza
espiritual no se fabrica, simplemente se cultiva y brilla con luz
propia. No existen cremas, lociones y manuales, pero es tan
indispensable y valiosa en este mundo moderno en el que cada día se
habla mas de apariencias y cada día menos de esos valores que en el
largo camino por la vida son un gran tesoro para quien los conserva y
posee.
No importa que tan niño, joven, adulto o mayor sea un ser
humano, la belleza interior es la única que aún con el paso del tiempo
sigue intacta".
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