SANTA CRUZ DE TENERIFE La exclusión de los sebadales de Canarias del nuevo Catálogo Español de Especies Amenazadas y en el nuevo listado de Especies Silvestres con Régimen de Protección Especial, actualmente en fase de información pública, ha impulsado la movilización de la comunidad científica canaria y de grupos ecologistas para que se corrija dicha desprotección.
Un grupo de científicos de la Universidad de La Laguna, entre los que se encuentra el catedrático de Biología Marina Alberto Brito, el profesor titular de Biología Joaquín Barquín y el biólogo y catedrático emérito de la ULL Wolfredo Wilpret encabezan una campaña ciudadana a través de internet en la que se solicita al conjunto de los ciudadanos que remitan al correo electrónico ´participacionpublica_especiesamenazadas@marm.es´ un escrito solicitando la inclusión de la seba en los citados instrumentos de protección nacional.
Dicha medida obedece a que el Ministerio de Medio Ambiente abrió en agosto el trámite de participación pública del proyecto de Real Decreto para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespe) y del Catálogo Español de Especies Amenazadas (CEEA), cuyo plazo se cierra el próximo 10 de septiembre.
La iniciativa, está teniendo un respaldo importante por parte de muchos ciudadanos que ven peligrar el ecosistema marino por "intereses puramente políticos y mercantilistas" en relación a las obras del puerto de Granadilla.
Por su parte, el grupo Ben Magec-Ecologistas en Acción anunció que se está preparando la documentación necesaria para presentar la próxima semana la solicitud de inclusión de los sebadales, con el respaldo de los colegios profesionales y las universidades canarias.
"Los sebadales son un endemismo canario que nunca ha estado en el catálogo nacional de especies protegidas. Este primer borrador recoge el listado antiguo, por lo que ahora nos toca presentar las enmiendas oportunas para que se incluya. Contamos con mucha documentación científica que respalda esta solicitud y vamos a solicitar el respaldo de los colegios profesionales (biólogos, veterinarios...) y de las universidades para que encabecen la propuesta de defensa de nuestros endemismos que están en peligro", afirmó Eugenio Reyes, miembro de Ben Magec.
Una de las medidas ya adoptadas para frenar la descatalogación de la seba canaria es el envío al Ministerio del informe científico elaborado por los doctores Alberto Brito Hernández, Julio Afonso Carrillo, Jacinto Barquín Díez y Wolfredo Wildpret de la Torre, con argumentos sólidos sobre la necesidad de incluir la especie Cymodocea nodosa (seba) en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.
Asimismo, han remitido los estudios y análisis que sobre la citada especie han servido de base para su inclusión en el documento elaborado a propuesta de la Dirección General de Medio Natural y Política Forestal del MARM denominado Lista roja 2008 de la flora vascular española donde se incluye a la Cymodocea nodosa en la Lista de Especies Amenazadas, con la categoría de "Vulnerable".
Según los informes científicos, los sebadales proporcionan, entre otros beneficios, hábitat para numerosos organismos, generan biomasa y producen oxígeno. Dan cobijo a numerosas algas que crecen sobre sus hojas y a gran diversidad de especies de invertebrados y peces, muchos de ellos de interés comercial. Se comportan como oasis de vida marina, y por ello han gozado de protección a nivel canario, estatal y europeo.
Su desaparición afectará, al menos, a 53 especies protegidas (el bucio, la estrella de mar canaria, la tortuga boba y el caballito de mar, entre otras), que verán desaparecer el entorno en el que habitan, La pérdida de parte de la importante biodiversidad canaria es otras de las consecuencias, "teniendo en cuenta que el sebadal de Granadilla es el más rico y mejor conservado de Canarias".