Fuga
Huías... pero era en mí y de ti quien huías.
¿Cómo? ¿Adónde? ¿Para qué? Por todo lo que es vial, ascensor, tragaluz, puerto para fugarse del hombre en el hombre: por la voz, por el pulso, por el sueño, por los vértigos del cuerpo...
Por todo lo que la vida ha puesto de catarata -en el alma y en el alba- huías... Pero era en mí.
Jaima Torres Bodet
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