ubicando algunas plantas de forma redondeada, esto propagará el Chi, es decir, la energía positiva que buscamos.
Intentaremos evitar las macetas metálicas, si podemos utilizaremos las de cerámica o barro en colores claros.
Buscaremos las formas redondeadas.
Los bonsáis, estos hermosos arboles son benefactores de esta filosofía, por ello y si nos gustan, colocaremos uno en nuestro dormitorio, en el escritorio o en la mesita de noche.
Si el árbol da frutos, simbolizará la unión conyugal y la fertilidad.