JESÚS
(Abril de 1952)
Diario de El Puente a la Libertad, Jesús Jesús
.. Jesús escogió la primavera para la manifestación gloriosa de la resurrección, ya que el ciclo de la naturaleza se eleva sobre esta maravillosa marea a la gloriosa manifestación de Vida Eterna. Cuán maravilloso es Su ejemplo de una unión consciente del cuerpo, la mente y el alma de un hombre con la Llama de la Resurrección que se ha balanceado como una marea cósmica desde el centro de la Tierra hasta su periferia con cada primavera sucesiva desde que la primera vez que la vida se manifestó en este planeta. Y, no obstante, cuan divinamente natural es que el hombre, la más alta inteligencia y conciencia más desarrollada en el plano terrenal, sea un heredero natural al poder y regalo de la Llama de la Resurrección, el cual ha servido a la Naturaleza en una pulsación rítmica cada doce meses. .. La naturaleza ha sido la servidora del hombre, creada para su placer, su sostenimiento, su “sirvienta”. ¿Podría entonces el Dios de la Naturaleza, que le da a los menores la plena descarga de la llama de la Resurrección, negársela a su Maestro? Jesús probó el derecho del hombre y poder individual para sintonizarse con la Llama de la Resurrección y transformar su naturaleza y deidad por ello. Jesús ató Su cuerpo y Su espíritu a la acometida triunfante de la llama de la Resurrección, y se elevó sobre su cresta a la Cristidad y Divinidad. .. Dos mil primaveras han venido y partido, y el hombre todavía se encuentra yermo, almas desgastadas y cuerpos decadentes, y permite que la Llama de la Resurrección le pase al lado rumbo al universo mayor, llevando su música y su promesa sin realizar, a alguna estrella más adelante. Y Jesús se yergue revelado como una flor íngrima en el jardín de la Vida de Dios. Algunos pocos, muy pocos, miembros del género humano tomaron ventaja de esta Llama Transmutadota de Vida Eterna, y ellos también se han acelerado en su poder vitalizador, floreciendo en el ímpetu de su regalo impersonal de vida inmortal y sempiterna. Estos constituyeron la Hueste Liberada de Luz, cuyo perfume, luz e irradiación son la luz del sol en la atmósfera densa de los pensamientos y sentimientos humanos. Son ellos los dispensadores de la armonía del cielo, a la cual su conciencia se ha elevado sobre la Llama de la Resurrección. Son ellos los guías que señalan el verdadero sendero, los “brazos sempiternos” que nos impiden caer en la sima, la sabiduría y el consejo detrás de los líderes de la raza. Ellos no están limitados por raza, ni credo, ni personalidad. Su negocio consiste en iluminar las almas de los hombre, en estremecer allí el deseo de liberación, e introducir la presencia de la Llama de la Resurrección doquiera que el alma, despertada, pueda encontrar su lugar verdadero en la plenamente floreada Perfección de espíritu despierto.
.. amororsamente, hannah
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