El respeto
es la posibilidad de aceptar tus defectos
y tus virtudes sin poner en tela de juicio
lo que ves en los demás,
porque jamás obtendrás de otros
lo que no eres capaz de darte tu mismo,
ya que en la medida que lo logres
serás capaz de otorgarlo a los demás.
El respeto es el reconocimiento del valor
inherente y de los derechos innatos
de los individuos y de la sociedad.
Estos deben ser reconocidos como el foco
central para lograr que las personas
se comprometan con el propósito
mas elevado en la vida.