El estudio más completo sobre el clima en la Tierra, elaborado a partir de 1.600 millones de datos, ha concluido que el planeta se ha calentado un grado centígrado desde finales de los años cincuenta. El físico Richard Muller, al frente del Berkeley Earth Project, que llegó a mantener posturas cercanas a los escépticos del cambio climático, admite que los resultados son muy similares a los obtenidos por el Instituto Goddard de la NASA, la Administración Atmosférica y Oceánica (NOAA) o la Met Office británica.
"Mi objetivo es conseguir un consenso científico y dejar de lado los prejuicios políticos e ideológicos que han desvirtuado el asunto", declaró a ELMUNDO.es el propio Muller, en las fases preliminares del estudio.
"Un cierto escepticismo es siempre sano en la ciencia", aseguró el físico, que criticó en su día tanto a los "exageracionistas" (como Al Gore o Thomas Friedman) como a los "negacionistas" que han logrado suprimir el debate sobre el cambio climático en los medios y en la opinión pública.
"Mi esperanza es que este estudio sirva para convencer a los sanamente escépticos y a los que expresaron sus legítimas dudas", admite ahora Richard Muller. "A los negacionistas no les vamos a convencer nunca: no les interesa la ciencia".
Curiosamente, el estudio ha estado en parte financiado por la Koch Charitable Foundation, vinculada a los magnates del petróleo Charles y David Koch, alineados durante la última década con los "negacionistas". Muller asegura que ninguno de los patrocinadores del estudio, auspiciado también por el Gobierno norteamericano, han influido en las conclusiones finales.
El Berkeley Earth Project ha logrado recopilar la mayor base de datos jamás disponible sobre el clima, con información recopilada desde el año 1800 y usando las mediciones de hasta 39.000 estaciones de seguimiento. El equipo de once científicos dirigido por Muller contaba con la presencia, entre otros, del Nobel de Física Saul Perlmutter.
Según Muller, el estudio desmuestra ·una tendencia de ciclos globales de subidas y bajadas de la temperatura muy en consonancia con los estudios de la NASA, la NOAA y la Met Office". La pregunta sobre la contribución real de las acciones humanas al calentamiento sigue sin embargo en el aire, aunque Muller espera poder contestarla en la segunda fase del estudio, que estará también concentrada en la medición de las temperaturas de los océanos.
La opinión de los escépticos
El estudio ha detectado que aunque el efecto de "isla de calor" en las grandes metrópolis es real, su contribución al calentamiento global no parece que sea muy significativa, teniendo en cuenta que el suelo urbano �pese a su impacto local- ocupa apenas un 1% de la superficie terrestre.
El informe ha sido recibido de momento con pinzas por escépticos del clima como Anthonhy Watts, que asegura que los autores han cometido un apreciable "error de procedimiento" en la investigación y critica el hecho de que no haya sido sometido a una revisión imparcial antes de hacerse públicos los resultados.
Jim Hansen, director del Instituto Goddard y "padrino" del cambio climático, ha respondido sin embargo positivamente en declaraciones a The Guardian: "El informe debería servir para convencer a quienes han tenido un honesto escepticismo hacia el cambio climático. Básicamente, confirma todo lo que ya sabíamos".
Articulo del diario el Mundo