A mis hermanos argentinos…
Quisiera darte mi copla sin que te suene a fandango, tampoco sé hacer un tango, ni un merengue ni un bolero, pero te soy bien sincero y aquí con mi copla ando, y te la voy recitando, y a tu patria me refiero.
La sabia naturaleza te dio belleza encendida. Te dio agua bendecida y mil jardines de rosas;
te dio mujeres hermosas y gauchos que dan su vida sin jugar las escondidas, cantando coplas preciosas.
Te dio belleza en mil cosas y las hembras exquisitas; son la envidia las rubitas de ojos azules y claros; son buenos, te dan sus manos cuando tú les necesitas, y el orgullo les incita cuando se sienten tu hermano.
Te saluda un borincano que tus bellezas admira, y que mil besos te tira flotando en el oceano; hoy yo te extiendo mi mano y digo regocijado: argentino, eres mi hermano… ¡Y eres bendita, Argentina!
Rafael Angel
Puerto Rico 9 de julio de 2003
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