Hace tiempo tuve un sueño, en él dialogaban el Amor y el Querer.
El querer le decía al Amor. -- ¿Por qué eres tan eterno?. Y El Amor con gran paciencia respondió. -- Quizás sea porque no poseo nada. -- Eso es imposible, - exclamo el Querer - posees todas las cosas, como yo ¿Acaso no somos el mismo ser?. -- ¿Tú crees? Pues dime ¿Qué es lo que tú posees? Respondió el Querer. -- El amante que posee al ser amado, el político que posee el poder,
el religioso que posee la fe, yo poseo todo aquello que quiero. El viejo Amor le dijo: --Ves, tú mismo te respondes, yo cuando amo no poseo al objeto amado.
Yo amo a una mariposa en vuelo, amo una flor con su tiempo contado
y amo al hombre que en su vida se asemeja al vuelo de una mariposa y al tiempo contado de una flor. Muy exaltado el Querer exclamó. -- Eso es una QUIMERA. En su inagotable paciencia el Amor le responde. -- El mundo es una QUIMERA. ¿Qué crees que soy YO?.