Pues no, no puedo ni imaginar. Pero sí puedo decirte que yo me quedé sin respiración y sin palabras con solo imaginar las escenas que describe el texto.
Y se me ocurren otros cuantos ejemplos probablemente muy cercanos para todos o muchos de nosotros, podemos no imaginar, recordar, cómo nos sentimos cuando hemos puesto nuestra confianza nuestro afecto y hemos hecho lo que la vida nos haya ido pidiendo por alguna persona y luego, como suele decirse, "si te he visto .. no me acuerdo".., pues así, es como hacemos sentir a los otros cuando damos la espalda a Dios ... o al propio ser humano el que no sea creyente, a nuestra especie, a nosotros mismos, con nuestras comodidades, nuestras cobardías, nuestra falta de interés, en el día a día, cuando no hacemos lo que sería propio entre seres humanos, cuando no cuidamos nuestro mundo, nuestra ciudad, nuestro barrio, cuando no cuidamos por facilitar la vida al vecino o al compañero, cuando no somos capaces de sacrificar un mínimo de nosotros por la mejora del de al lado. REcuerdo la película ésa de cadena de favores o algo así. A todos nos encanta y todos pensamos que sería muy bonito, pero que es fantasía. Y es cierto, es fantasía que así sea de hoy para mañana, pero si todos pensamos una y otra vez que para qué esforzarnos si nadie se va a enterar , si el mundo después de este acto va a serguir siendo el de antes.. entónces es que sí, seguirá siendo el de antes, nada ni un átomo se habrá modificado gracias a nuestra acción.
Pensamos que el todos esos seres que pululamos unos alrededor de otros, no dependen de nosotros, no todos, sin embargo, cuando uno de nosotros está en un mal momento, necesitaríamos que alguno o algunos de esos seres estuviera atento, pero... como ese otro ser estará pensando que para qué esforzarse.. si el mundo va a seguir igual..., todo sigue igual y cada uno tiene que vérselas solo y a solas.
A Dios gracias, todos tenemos la experiencia de que no siempre es así, todos tenemos la experiencia de que tanto a nivel profesional como familiar o de amistad, ha habido alguien que estuvo donde debía y a la altura cuando pasamos una mala situación, bien, pues éso sucedió porque en aquella ocasión, ese médico, o taxista o barrendero o familiar o amigo ese día no decidió tomarse vacaciones y no dio la espalda sino la mano.
Muchas gracias Esperanza, qué buenas reflexiones nos traes.
|