Ufff, está bárbaro este artículo que trajiste Myriam
Es que es para entretenerse punto por punto
a ser mi mismo yo, un proyecto de vanidad.
DIANA!, y observo de nuevo una equivocación de significados. Vale, que
siempre digo que puedo equivocarme, estas cosas son difíciles de medir,
pero me parece que hay suficientes pruebas. Me refiero a que cualquier padre
o no padre vería con muy buenos ojos éso de ver en el hijo a su propio yo,
porque claro qué es más nuestro que nuestro YO, es como decir, es parte
de mí , es más, soy yo mismo. Sólo que en ese yo mismo está incluido
el ego que nos juega estas malas pasadas. Efectivamente, creo, que no
es tanto que estén criando, educando mal a los hijos, sino que a sí mismos
los adultos estamos desarrollándonos mal, y éso se hace más evidente
en el producto "niños".
Aún no está tan lejos la época en la que la vida era muy distinta y los valores
que hoy se siguen "valorando" en teoría, se valoraban en la práctica, la diferencia
es precísamente ésa, que se ejercitaban y ahora hemos aprendido mucho de
la imagen, todo el esfuerzo que antes se empleaba en SER, hoy se ocupa en
parecer y , como los niños, perdemos el norte. Y lo perdemos de la misma forma
que lo pierden ellos, porque da buenos resultados, existe el refuerzo rápido y
positivo a nuestras nuevas "adquisiciones", y nos complacemos con "creernos"
lo que tan sólo está de cara al público .
Bien dice el tal Honoré, que "CONOCERSE" es uno de los aspectos fundamentales
para poder guiar a los hijos. Si no conocemos nuestras trampas, si nos negamos
( porque no existe hoy realmente presión ) a reconocer nuestra verdad y mucho
menos a expresarla y si lo hacemos va a ser en un contexto y con unas fórmulas
que de nuevo vamos a reforzar nuestras trampas.., está crudo que mostremos
ni enseñemos algo parecido a unas personitas que aún no han desarrollado todas
sus capacidades.
Esa preocupación excesiva, ese nerviosismo que muestran muchos por el bienestar
e incluso por la educación, sí tanto académica como social ( es curioso ), no viene
acompañada de un buen modelo, así que no parece tener otra función que la de
acallar conciencia y por supuesto , de nuevo felicitarse por contar con un valor, el
de mantener una atención constante en sus hijos.
Los padres no sólo no ponen límites, sino que como también apunta, les evitamos
problemas complejos, en un alarde de paternalismo , que viene a ser como ese
alarde de amiguismo con que solemos tapar apresuradamente , negando o disfrazando
de mala manera un error o falta de alguien a quien supuestamente tenemos afecto.
Y nos gratifican todos por esas conductas, con lo que se perpetúan en los unos
y en los otros, es como un pacto implícito que proviene , en mi opinión de un
mal entendido afecto. Cuyos resultados..bueno, no son como el de una medicina
en mal estado, no son tan rápidos ni tan trágicos, pero yo no concibo que traiga a
cuenta, porque al final unos por otros, todos vamos pagando y encima ni
siquiera nuestras propias cuentas.
Y los niños no admiten no solo castigos sino ni siquiera críticas porque .. a ver
qué adulto acepta de medio buen grado que su sistema de educación es revisable y
que pasa por mirarse a sí mismo, con lo muchíiiiisimo que quieren a sus
hijos , con lo muchíiiiisimo que se han ocupado de leer y aprender "fórmulas" y
lo bien que manejan todas las teorías que por supuesto ponen en común , aleccionándose
unos padres a otros alrededor de un café, mientras los niños se entretienen
ingénuamente con las máquinas tragaperras o su correspondiente game... como se llame,
que , porsu, no "necesita" de otro niño para disfrutar.
te digo que tiene carrete el articulito