D. P. PILAR DE LA HORADADA Una actuación de "striptease", con escenas de sexo explícito, cerró el pasado 15 de noviembre la novena edición del tradicional "Almuerzo Motero" celebrado en Pilar de la Horadada (Baix Segura), uno de los actos típicos de este otoño. Con la colaboración del ayuntamiento pilareño, el evento estaba organizado por el Moto Club 12+1 y junto a varios miles de aficionados a las motos, habituales en este tipo de concentraciones, en la carpa se encontraban algunos menores que pudieron presenciar sin inconveniente la actuación de las dos "strippers" profesionales que amenizaron el almuerzo.
Según testigos presenciales, pasadas las dos de la tarde, las dos "gogós", que habían realizado distintos números de baile a lo largo de la mañana, iniciaron lo que para muchos de los presentes suponía el plato fuerte de la jornada festiva, un desnudo a ritmo de música. Ese era también el momento en el que invitaron a algunos de los espectadores a compartir su espectáculo de alto contenido sexual, mientras varios niños observaban la actuación al pie del escenario.
Era el momento culminante del encuentro que había congregado en la carpa del recinto ferial pilareño a unos 3.000 moteros. A pie mismo de escenario, en las escaleras de acceso al mismo y en primerísima fila, según relataron asistentes al acto a este periódico, varias niñas contemplaban boquiabiertas las evoluciones del voluntario y de las chicas. Según explicaron a este diario las mismas fuentes, en una secuencia que se prolongó durante unos 25 minutos, nadie apartó a los menores, con edades comprendidas entre los 4 y 5 años, del escenario, ni advirtió de la situación. Agregaron además que "casi todos los espectadores estaban tan atentos a lo que sucedía en el escenario, que a punto estuvieron de tropezar con los niños" que contemplaban entre distraídos y aburridos las evoluciones de las "strippers" desnudando a uno de los voluntarios. "Casi todos los que subieron, cuatro o cinco, al escenario estaban pasados de alcohol y seguían el juego hasta el más mínimo detalle", indicaron las mismas fuentes a este periódico.
El coste para participar en el almuerzo pilareño era de diez euros. Para los niños el acceso al recinto era gratuito. La convocatoria de este tipo de citas moteras que suelen celebrarse los fines de semana y que incluyen además de la realización de alguna ruta turística, comida, una bolsa de regalo con material promocional, música, actividades lúdicas y barra libre.
El Ayuntamiento, según pudo confirmar este diario, colaboraba, como en el resto de las ediciones, con la cesión del recinto ferial, instalado durante buena parte del año para la celebración de este tipo de eventos públicos, y con la regulación del tráfico para las motocicletas de gran cilindrada que inundaron el municipio.
El alcalde se desvincula y el organizador dice que no ha recibido ningún tipo de queja
Ignacio Ramos, alcalde de Pilar de la Horadada reaccionó ayer con "estupor" e "incredulidad" ante el espectáculo que organizado por el club motero. "El Ayuntamiento no tiene nada que ver con los contenidos programados en ese evento -explicó-, cede eso sí el recinto ferial a todo aquel colectivo que lo solicita". Ramos mostró su rechazo a este tipo de espectáculos de plano. Por su parte, Juan José Ruiz, presidente de la entidad organizadora, el Moto Club 12+1, que cuenta con cien asociados, explicó que este colectivo no ha recibido ni una sola queja sobre el espectáculo. Ruiz lamentó que éstas hayan llegado bajo el anonimato a los medios de comunicación, resaltando que la actuación de las "strippers" es uno de los elementos más habituales en este tipo de encuentros y señaló que en ningún caso estaba "subido de tono". Ruiz, no obstante, aseguró que controlar quién está contemplando el espectáculo "es dificilísimo" y quiso recordar que la responsabilidad de permitir que los niños visualizaran el "striptease", es siempre de los padres.