"Se requieren modelos bellas y en forma, de entre 1,73 y 1,76 de altura y entre las tallas 38 y 40. Ni más grandes ni más pequeñas. Tener entre 18 y 25 años. Imprescindible tener pechos reales. No presentarse si se llevan implantes".
Estos son algunos de los requisitos necesarios para formar parte del elenco de sirenas que aparecerá en la próxima entrega de la millonaria saga Piratas del Caribe. La novedad llamativa del casting es que se piden bellezas que no hayan pasado por el quirófano para aumentarse el pecho. No se especifica si otro tipo de retoques serán censurados. ¿Vuelve la naturalidad a la gran pantalla tras décadas de Botox y curvas creadas con tiralíneas?
Rob Marshall, el nuevo director de la cinta En costas extrañas, que llevará a Jack Sparrow a la caza de la Fuente de la eterna juventud, ha elegido ala voluptuosa Penélope Cruz para interpretar a la hija de Barbanegra. ¿Ha cambiado el canon de belleza en Hollywood? Cada día más directores de la meca del cine critican la botoximación de sus actrices, de las que afirman pierden expresión y capacidad interpretativa. Por ejemplo, Martin Scorsese odia los labios de colágeno. Algunas de las estrellas más cotizadas, como Cate Blanchett o Kate Winslet, le han declarado la guerra ala cirugía. Rachel Weisz ha afirmado que "el Botox debería estar prohibido para los actores igual que los esteroides lo están para los deportistas".
Desde Disney, la productora de Piratas del Caribe, fuentes cercanas al rodaje -que se inicia en abril en Hawai- aseguraban al rotativo inglés, que se busca la "naturalidad". Sin embargo, en declaraciones al diario británico The Times, la protagonista de las entregas de Disney, Keira Knightley, afirmaba esta semana que durante la primera entrega de la saga pasó horas en maquillaje, "donde literalmente me pintaban los pechos". En las promos de Chanel y de El rey Arturo, los productores optaron por el Photoshop.
Naturalidad
Esta "naturalidad" es una zona minada en Hollywood. Los estudios empiezan a rechazar el Botox y el colágeno, que, por ejemplo, han convertido a Nicole Kidman en un robot de cerámica y han deformado los rostros de Meg Ryan, Sylvester Stallone o Mickey Rourke, entre otros; pero por otro lado aparecen cada día nuevos tratamientos de belleza que desdibujan las fronteras de la cirugía plástica.
La revista Grazie recogía hace unas semanas que Jennifer Aniston había aumentado de busto gracias a las inyecciones de Macrolane, la nueva moda estética de Hollywood que deja atrás los implantes. ¿Dónde empieza y acaba la "naturalidad" de Hollywood?
EL CACHÉ
Penélope al final será una pirata más
Rob Marshall, el director de 'Nine', se debió quedar prendado de Penélope Cruz, que logró este año colarse en los Oscar como candidata a Mejor actriz secundaria. La española lleva semanas negociando con Disney para convertirse en la hija de Barbanegra en la cuarta entrega de 'Piratas del Caribe'. EL rodaje comenzará en junio en Hawai. El estreno, con Johnny Depp como Jack Sparrow, se estrenará en mayo de 2011.