Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

AiresdeLevante
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Portada original 
 General 
 POEMAS 
 ENLACES 
 CUMPLES 
 RADIO 
 EL MEU POBLE 
 WoldGroups 
 G I F F S 
 Estamos también en Facebook 
 Parlem de tot 
 Aragoneses al habla 
 Radio me la sudas 
 CHAT FACEBOOK 
 Paridetes intel.lectuals 
 RECETARIO 
 Configuración de móviles para Gabito 
 
 
  Herramientas
 
General: JoaquÍn Serrano Soler, nos ha dejado.
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 3 en el tema 
De: BigTour  (Mensaje original) Enviado: 08/09/2010 01:19
 
Quien pudiera escuchar uno de sus primeros programas en Radio Barcelona, "Cascabel", un espacio de cuentos infantiles...
... quizás uno de ellos era este:
 
EL MISTERIO DEL CASCABEL
Maria Fernanda Macimiani©

La mamá de Lucrecia estaba muy preocupada porque Piluso en una de sus aventuras había perdido el cascabel que llevaba en su collar. Lucrecia intentaba seguir a su gato Piluso para ver adónde había estado pero él se escapaba y no lo podía encontrar.
Entonces se metió en la casita de las muñecas y les preguntó a sus juguetes si alguno tenía una idea para descubrir a Piluso, las muñecas, los ositos y los otros chiches quisieron colaborar pero solo el viejo gato de peluche amarillo le dijo lo que podía haber pasado.

- Lucrecia, yo vi llegar a Piluso muy agitado y golpeado estos días y creo que sé porque.
- ¿Por qué? - preguntó la nena.
- Los gatos somos muy paseanderos, nos gusta visitar los techos de las casas del barrio, los jardines y maullar de noche para cortejar a las gatitas bonitas. Pero a veces nos metemos en líos.

Lucrecia al oír atentamente lo que dijo su peluche, se decidió a investigar en que andaba Pilusito. Fue a la pieza de su mamá y sacó un cofre lleno de cosas útiles que guardaba para momentos especiales. Como encontrar el cascabel era algo muy especial comenzó a sacar del cofre : soguitas, tizas, guantes, pegamento, clavos y también llaves, velas, un reloj y una calculadora. Hasta que al fin encontró algo interesante; la crema invisibilizadora que le dieron en la juguetería del barrio. Nunca la había usado pero este era el momento para hacerlo. En un minuto Lucrecia se había pasado la crema desde el pelo hasta la punta de sus zapatillas rojas.
Muy segura se escondió y esperó que su gato saliera a dar una vuelta como todas las tardes y lo siguió.

Piluso siempre corría y se escapaba cuando la veía fuera de la casa pero esta vez parecía no verla ni oírla. Iba apurado por la vereda y no parecía ni acordarse del cascabel que mamá le había puesto en el collar. De repente ¡Pruch! El gato dio un salto y cayó parado sobre el muro de una pequeña casita llena de flores y enredaderas. Lucrecia estaba muy cerca pero tal vez gracias a la crema invisibilizadora él no la veía y caminaba sobre el muro contorneando su cuerpito de acá para allá con mucha elegancia dando de vez en cuando unos largos maullidos estirando su cuello.

Todo parecía mas o menos normal hasta que no sé de dónde aparecieron junto a el gatito muchos otros gatos, mas grandes y sucios que Piluso. Fue horrible; ellos le daban manotazos con sus uñas afiladas y lo querían tirar del muro, Lucrecia ya no podía aguantar mas, cerró los ojitos y deseó con muchas ganas que los gatos callejeros no dañaran a su Pilusito y como por arte de magia ¡Plufff! Todos huyeron rápidamente.

Menos Piluso que seguía allí cansado pero firme como un príncipe, entonces la nena se acercó más y pudo ver que de la casa salía una abuelita con una mantilla rosa que le cubría la espalda y entre sus brazos traía una hermosa gata siamesa, blanca y coqueta. Lucrecia quedó maravillada y mas todavía cuando vio que la gata tenía colgado de su collar el cascabel de Piluso.
En ese instante Lucrecia había descubierto el misterio, lo que pasaba era que su gato se había enamorado y como buen enamorado tenía que regalarle algo a su novia y él le regaló lo mejor que tenía su cascabel y su amor.

Lucrecia volvió a su casa muy contenta y se dio un buen baño porque tenía miedo de que después de tanta aventura su mamá no la viera y no le sirviera la cena.

Maria Fernanda Macimiani

Oír el cuento



Primer  Anterior  2 a 3 de 3  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 3 en el tema 
De: BigTour Enviado: 08/09/2010 01:41

Respuesta  Mensaje 3 de 3 en el tema 
De: cascabell canario Enviado: 08/09/2010 06:28


 
©2025 - Gabitos - Todos los derechos reservados