Tres de las obras más reconocidas del mundo -'Las señoritas de Aviñón' y 'El Guernica' de Picasso y la 'Marylin' de Warhol- han perdido en la carrera por convertise en la pieza de arte contemporáneo más influyente. La ganadora es el urinario masculino que en 1917 firmó el francés Marcel Duchamp.
El retrete en cuestión se ha puesto en el primer lugar de una lista de 500 elaborada por un grupo de expertos, coincidiendo con la próxima designación del Premio Turner de este año.
Lo cierto es que la obra de Duchamp sacudió los cimientos del arte cuando fue presentada como pieza de museo cuando no había terminado siquiera la Primera Guerra Mundial.
La influencia del francés llega a estos tiempos. Tracey Emin, uno de los artistas británicos modernos con más renombre, se inspiró en su obra para crear una de sus obras más aplaudidas: una cama sin hacer.
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