Y eso a pesar de que esa discoteca, Coyote Lounge, pertenece precisamente a Óscar Lozano, empresario de la noche madrileña y ex de la Esteban. “En esta discoteca también baila una de las protagonistas, Marta”, explica el director del programa, Sebastián Moguilevsky. “Esteban es un personaje de televisión. En este programa queremos retratar a una parte de la sociedad”, comenta por su parte el nuevo director de antena de la cadena, Fernando Jerez.

No serán las únicas diferencias entre estas chicas y la colaboradora de Sálvame. En laSexta, al contrario de lo que ocurre en Telecinco, este tipo de personajes no tendrán más recorrido en sus programas. “Las cadenas determinan la notoriedad y en laSexta siempre hemos sido respetuosos. Este programa está hecho desde el cariño y así se tratará”, añade Jerez, que el pasado diciembre abandonaba Cuatro tras la fusión con Telecinco.

En cuanto a las críticas debido a la posible guionización del programa, Jessi demostró ante los periodistas su naturalidad comentando como fue elegida para el programa. “Estaba yo en la Fabrik cuando vinieron unos tíos y me dijeron que eran de laSexta. Y yo me dije: ‘¡Que querrán estos de la secta esa de los testigos de Jehová!”.

Momentos como éste podrán verse en la cadena de Mediapro a partir del próximo domingo, a las 23:15 horas. El programa, producido por Cuatro Cabezas (CQC, Mujeres ricas) retrata la vida de cuatro mujeres anónimas, de barrio, libres y atrevidas: una madre soltera que trabaja en una nave industrial; una cantante de orquesta que tras 7 años de noviazgo y dos hijos ha decidido casarse; una joven gogó para la que su espectacular físico lo es todo; y un ama de casa extravagante y con una personalidad arrolladora cuya meta es encontrar la fama.

El nuevo espacio acompaña día a día a estas mujeres que viven en su barrio de toda la vida y en cuyo mundo las operaciones de aumento de pecho o el mundo de la noche forman parte de su existencia. Una entretenida mirada del universo de unas mujeres que se han convertido en dueñas de sus propias vidas, cuyo particular concepto de la moda las delata y que practican el descaro como declaración de intenciones.

Las protagonistas de Princesas de Barrio extienden sus vidas extremas a todos los ámbitos de su día a día: son apasionadas en el consumo, en sus gustos, en sus excentricidades, en sus relaciones… Tienen sus propios códigos, no les gusta pasar desapercibidas y sueñan con el éxito. Las cuatro luchan constantemente por salir adelante y en ocasiones sus caprichos o su forma de consumir superan sus posibilidades.