En Abril se cumple un nuevo aniversario de aquella paliza memorable en que los mercenarios anticastristas, la CIA y el gobierno norteamericano tuvieron que morder el polvo.
Transcurrió en el año 1961 y fue la frutilla del postre de la agresión yanqui que con prisa y sin pausa iba en aumento desde los albores de 1959.
La idea de los mafiosos, los terratenientes y los batistianos, expulsados por la Revolución cubana, era desembarcar en la Isla con el apoyo de EEUU.
Les salió el tiro por la culata, porque ante ellos había un pueblo decidido a defenderse que no les dió tregua desde el momento en que osaron poner un pie en la Isla.
Esa fue la primer lección que le dió la Revolución cubana al Imperio yanqui y a partir de ahí, Cuba se convirtió ante el mundo en una Nación heroica y respetada.