Los teléfonos inteligentes que tenemos hoy en día la mayoría de las personas, van ligados a una tarifa de datos, y también podemos conocer la cobertura más o menos real que recibe nuestro smartphone, viendo justo al lado de las barritas de la cobertura las nomenclaturas: 2G ó GPRS o en algunas ocasiones E, ésta última representa la versión 2.5G mejorada (EDGE) y así aumenta nuestra velocidad de datos. Con esta señal, podremos hacer llamadas, enviar SMS y navegar por internet a baja velocidad.
Puede que también nos encontremos con un círculo muy pequeño, sobre todo en los iPhone, esto significa que estás conectado vía GPRS, por lo que navegarás más lento.
Pero también puedes encontrarte con 3G, 3G+, HSDPA, que representan la cobertura 3G ó 3.5G, es decir, mejor servicio que con GPRS o EDGE, pudiendo hacer todo lo anterior pero, llegando a navegar a una velocidad mayor, accediendo sin problemas a las redes sociales, ver vídeos sin esperas de carga, enviar emails, fotos y archivos multimedia…
Además de esas señales, en los teléfonos Android, os podéis encontrar la letra “H“, esta es la máxima velocidad, ya que significa HSDPA y navegarás a 3.5G.