DICEN QUE LA GENTE
YA NO SE RIE
Es como si sobre las ciudades y las calles, sobre las casas y fábricas, en los coches, autobuses y en el metro, en las habitaciones y los despachos y sobre MOSTRADORES Y ventanillas dijera un gran rótulo con letras colosales:
"PROHIBIDO REÍR".
Parece como si hubiera emigrado la risa un otro lugar muy lejos de nuestras vidas.
Porque en nuestras casas, con los problemas diarios, ha muerto la alegría.
Vivimos en un mundo de pena.
Si hacemos caso a la tele ya la prensa, pronto no habrá nadie en nuestra tierra contento con lo que tiene.
Desde el búnker inabordable de nuestras cuatro paredes lanzamos al mundo encarnizadas críticas y protestas encendidas.
La gente ha muerto de frío por dentro.
¡No pongas esa cara de vinagre! Ni vayas por ahí con ese gesto Amargado.
Aunque no tengas muchos motivos, riete en casa y sal a la calle sonriendo. Necesitamos más que nunca una risa sana y cordial.
¡La risa nos hace libres y felices!
D/A